Este es un deporte que muchos practican para divertirse junto al mar. Pero también hay campeonatos mundiales de voleibol de playa. Y desde 1996 es también un deporte olímpico.

En las competencias se tienen que seguir estrictamente las reglas, como en el voleibol tradicional. Se puede golpear la pelota con cualquier parte del cuerpo y hay que pasarla por encima de la red para hacerla caer en el campo contrario.

La diferencia es que en el voleibol tradicional hay seis jugadores por equipo, y en el de playa son solo dos. Esto significa que ambos tienen que saber jugar en todas las posiciones, tanto de ataque como de defensa.

Otra particularidad del voley playa es la forma en la que coordinan su juego los integrantes de un mismo equipo. En el fútbol, por ejemplo, es frecuente que los jugadores se den mutuamente indicaciones a los gritos. Pero esto precisamente se trata de evitar en el voley playa. En este deporte se intercambian señales secretas con un lenguaje de manos, tratando de que el rival no lo vea. Incluso se hacen estas señales con las manos en la espalda.

¡Uno, dos, tres pases… y luego la pelota tiene que ir al campo rival! Esta es otra característica, al igual que en el voleibol tradicional, se puede tocar hasta tres veces la pelota antes de lanzarla al equipo contrario. Pero no la puede tocar dos veces seguidas el mismo jugador.

Fuente: DPA