Expresarse para emprender
Una de las funciones del docente consiste en motivar a los estudiantes a que se descubran como individuos emprendedores. Para ello, hay que darles las herramientas que les permitan entender su esencia y en función de está, emprendan algún proyecto o actividad.
Es importante propiciar espacios de expresión sin limites. Aunque hacer que los estudiantes se expresen parezca una tarea abrumadora por los limites que frecuentemente ellos mismos se imponen, cobra sentido pues se forma al enfocarla a que cada joven se conozca y se vea a sí mismo como un potencial emprendedor.
El motivador Paul J. Meyer afirma que «todo lo que usted vívidamente imagine, ardientemente desee, sinceramente crea y con entusiasmo emprenda… inevitablemente le sucederá», por lo que, en base a ello y en experiencias exitosas en las que los estudiantes se empoderan, pierden el miedo y se ven exitosos en función de sí mismos, se sugiere guiarlos hacia su realidad emprendedora con las siguientes actividades:
· Definir emprendimiento y éxito, pues refleja su escala de valores, además de sus sueños.
· Responderse: ¿para que soy bueno?, ¿que me gusta?, ¿en qué espacios soy líder y que tipo de líder?, ¿cuál es mi zona cómoda y por qué?, cuyas respuestas propician el autoconocimiento y la auto aceptación.
· Expresar sus descontentos, a los cuales ofrecen soluciones de toda índole, se les motiva para que no se limiten y digan todo lo que se les ocurra, aunque lo consideren loco. Acompañado de ejemplos de la vida real, esto propicia la autoevaluación y el respeto por las ideas ajenas.
· Explorar sus motivaciones y reflexionar qué los mueve a hacer, a emprender.
· Por último, establecer las situaciones de la vida que representan potenciales obstáculos para emprender y buscar alternativas viables.
La ventaja de propiciar que los estudiantes se expresen es que emprendan según sus convicciones y no según un modelo establecido, rompan paradigmas y rechacen estereotipos. Para esto, el docente debe conocer a sus estudiantes y valorarlos como individuos y emprendedores únicos e inigualables, respetarlos y recordarles que son capaces de lograr lo que se proponen.
Colaboración: Lcda. Daniela Flores de Chacón, Facultad de Educación, Universidad del Valle de Guatemala.