El Sistema Braille es un sistema de escritura a través del tacto especialmente diseñado para personas con discapacidad visual.

Este tipo de escritura utiliza una serie de puntos en relieve que se interpretan como las letras del alfabeto permitiendo que las personas con discapacidad se incluyan mejor en el mundo actual. ¿Alguna vez te habías preguntado qué son esos “puntitos” junto a los botones de un ascensor? Pues eso es el Braille. ¡Y hasta hay libros completos escritos así!

Este método ha ayudado a muchas personas no videntes que antes eran completamente excluidas del resto del mundo y permitido que se sientan mejor respecto a su relación con su entorno.

Historia del Braille

El Sistema Braille fue la invención de Louis Braille (nacido en 1809) de Coupvray, Francia. Cuando tenía 3 años, sufrió un accidente con las herramientas del taller de su padre mientras jugaba: se perforó un ojo y esto provocó una severa infección que se trasladó al otro. A los 5 años, el pequeño Louis quedó totalmente ciego.

Sus padres se negaron rotundamente a que no tuviera la oportunidad de estudiar; por lo que a los 7 empezó la escuela, con buenos resultados. Cuando tenía 10 años se mudó a París porque obtuvo una beca para estudiar en el Real Instituto para la Juventud Ciega de Francia.

En el RIJC ya utilizaban un sistema básico para aprender a escribir; pero este consistía únicamente de las mismas letras del abecedario resaltadas y tomaba mucho tiempo. Posteriormente se instituyó un sistema de lectura táctil hecho inicialmente para soldados que se basaba en puntos y guiones llamado “escritura nocturna”; pero, Louis lo encontró todavía muy complicado y poco práctico.

Sin embargo, esa fue la base para desarrollar su propio sistema, llamado hoy en día en su honor. Aunque lo completó cuando tenía 15 años; se comenzó a utilizar dos años después de su muerte por  tuberculosis (a los 43 años).

Características del Sistema Braille

Existen 256 caracteres en Braille. La idea es que las personas los sientan y reconozcan de inmediato solo con el toque de la yema de sus dedos. Se escribe de izquierda a derecha y se puede adaptar a distintas lenguas. Incluso, existe una traducción de las notas musicales, de la matemática y de fórmulas científicas.

Está basado en seis puntos que se distribuyen de diferentes formas; por lo que se considera un sistema binario. No se trata de un idioma, sino de un alfabeto y lenguaje reconocido de forma internacional, capaz de exponer letras, números y signos.

Existen pequeñas variaciones en cada idioma, añadiendo letras o reemplazándolas por otras, propias de cierta lengua. (como la “ñ” en español, por ejemplo). En los alfabetos como el japonés y chino, combinan sonidos en caracteres Braille para facilitar su comprensión ya que de por si, sus alfabetos se basan en símbolos.

El 4 de febrero de 2019, se celebró por primera vez el Día Mundial del Braille. Este día, impulsado por las Naciones Unidas, busca «crear mayor conciencia sobre la importancia del Braille como medio de comunicación para la plena realización de los derechos humanos para las personas ciegas y con deficiencia visual».

Es responsabilidad de todos formar sociedades más humanas con mayor inclusión; ya que todos deberíamos de tener las mismas oportunidades para estudiar y desarrollarnos. El uso correcto y amplio del Braille es solo una más de las actividades que favorecen la inclusión ciudadana.

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