Normas de cortesía
Es el conjunto de medidas sociales que son establecidas por los integrantes de una comunidad con el fin de regular el comportamiento de los individuos para favorecer y corregir otras conductas.
Intermedio
AÑOS
El saber cómo comportarse en la vida diaria al comunicarse con los demás es de vital importancia para lograr el desarrollo correcto de las comunidades. Esta comunicación no solo implica palabras sino también va comprendido el lenguaje corporal y gestual.
Las normas de cortesía con el conjunto de medidas y acciones de carácter social que son establecidas para regular el comportamiento de los miembros de una comunidad y corregir el actuar de algunos que puede causar incomodidad u ofender a los demás.
Entre las normas de cortesía más comunes que buscan la convivencia armónica están:
Saludar: esta norma de cortesía implica dar los «buenos días» o «buenas tardes» en lugares con gran cantidad de personas demostrando afecto y amabilidad. Es un gesto de cordialidad y la personalización del saludo depende del grado de amistad o tipo de relación entre las personas.
Ser Puntual: llegar a tiempo y no dejar a alguien más esperándonos demuestra respeto hacia el tiempo de los demás.
Prestar atención: debemos comprender lo que la otra persona nos está diciendo. Aunque podemos participar activamente en la conversación, es importante no interrumpir constantemente. En la actualidad, no ver el teléfono es una forma de mostrar respeto ante lo que nos están diciendo.
Presentación Personal: el aspecto físico de una persona es una forma de respeto y comprensión de la situación o ámbito en el que se desarrolla. No solo implica vestirse adecuadamente, sino también una higiene personal correcta.
Uso correcto de vocabulario: usar vocabulario correcto implica utilizar las palabras correctas de un idioma según las personas que lo rodean o la situación que se vive. Es importante poder mantener un nivel de vocabulario adecuado para cada ocasión evitando incomodar a los demás con el uso de palabras incorrectas o vulgares.
Prudencia: actuar con prudencia implica hablar o actuar de forma cuidadosa con moderación y precaución buscando evitar causar daños y respetando a los que nos rodea, sus sentimientos e individualidad.
Amabilidad: es el trato que demuestra cortesía y afección hacia los demás y sus sentimientos. Se puede demostrar a través de palabras, gestos o acciones tomando en cuenta las formas correctas de dirigirnos a los demás con respeto.
Comprensión: esta es la capacidad de comprender a los demás, de entender de la mejor manera cómo se sienten; que les molesta o incomoda y que les hace sentir felices y cómodos.
Dominio propio: esta norma de cortesía se relaciona a la inteligencia intrapersonal, es poder comprender los sentimientos que uno tiene y saber manejarlos en todas las situaciones.
Serenidad: mantener la calma y estabilidad en momentos de mucha presión es muy importante para el desarrollo correcto del día a día. Sirve para evitar discusiones o causar escándalos innecesarios y buscar las soluciones correctas a posibles problemas.