La tradición oral de este pueblo relata que este se originó en el centro del Corazón del Cielo y de la Tierra. Se menciona también una historia ligada al proceso de evangelización que sufrió la comunidad ubicada en Pai Conob o Pueblo Antiguo que menciona la aparición de la Virgen a varios ancianos por cuatro días consecutivos, cosa que llevó a establecer el pueblo en el lugar de la cueva encontrada donde se aparecía la Virgen convirtiéndose de ese modo la patrona de los q’anjob’ales.

Este pueblo cree que todo depende de un Dios: la vida, los animales, la lluvia, el Sol, las estrellas, la Luna, el fuego y la tierra. Tienen un grupo de ancianos rezadores que realizan ceremonias en las cruces del pueblo pidiendo por el bienestar del pueblo. También cuentan con los “Ajan”, que son personas de la comunidad con gran experiencia en la cura de enfermedades utilizando remedios tradicionales.

La base de su gastronomía es el maíz y el café es la bebida más consumida aunque se elaboran atoles de maíz y frijol también.

Confeccionan marimbas como artesanía, tanto la sencilla de un teclado como la doble de dos teclados.