Este pueblo, originalmente conocidos como “Rabinaleb’” formó parte de los Q’eqchi’es y de una unidad de los K’iche’, aunque eran independientes de estos con deidades provenientes de la tradición mexica.

Poblaron a partir del 1350 y 1400 d.c el área conocida como Rabinal hasta que cayeron ante los colonizadores en el siglo XVl.

Debido a la dominación inicial recia y dura de los conquistadores y colonizadores en las Verapaces, Fray Bartolomé de las Casas logró que se autorizara la presencia de frailes dominicos para la evangelización y se prohibieran los españoles encomenderos llamando a este experimento la “Conquista pacífica de la Verapaz”. Posteriormente, esta región fue influenciada por alemanes quienes llegaron a cultivar cafe.

Como parte de su cosmovisión, se define que el hombre tiene una relación estrecha con la naturaleza y que es su deber mantenerla en equilibrio. Tienen guias espirituales (Aj Q’iji) que son considerados muy sabios y los encargados de mantener un equilibrio entre lo sagrado y lo cotidiano.

Consideran que un desequilibrio emocional y espiritual es el causante de las enfermedades ya que la vida es un conjunto de energías formada por los cuatro elementos esenciales (agua, aire, tierra y fuego) y creen que el cerro conocido como Kajiup es el lugar donde habitan los nawales y comunidades que los protegen de todo mal.

En gastronomía resaltan con la comida conocida como pinol de gallina o de chompipe y en la bebida con el atol blanco.

El tejido es considerado una de las artesanías más elaboradas usando el hilo mish y de origen alemán en telares de cintura para realizar servilletas, huipiles, cintas y fajas. También elaboran teja de barro de las montañas aledañas llegando hasta una elaboración de 250 tejas diarias por cada artesano.

Finalmente resaltan en la danza con la danza-drama llamada Rabinal Achí realizada en honor a San Pablo y San Sebastián.