En los últimos años, cada vez se escuchan más personas comentando sobre casos de acoso o “bullying” en las noticias, la colonia, el colegio y en otros lugares.

Este aumento de cantidad de personas comentando no significa que este sea un tema nuevo o “de moda”, el acoso o violencia escolar ha existido por muchos años, solo que antes, nadie hablaba de él.

Te preguntarás entonces, ¿qué es el bullying? 

Este es un acto de violencia que implica agredir física o verbalmente e incluso humillar a otra persona de manera repetida. Puede incluir insultos, divulgación de rumores, ignorar a alguien o incluso herir física o emocionalmente a otra persona que es considerada “más débil”.

Sucede en diversos ámbitos y etapas de la vida, por lo que no solo los niños en edades escolares son las víctimas, aunque, sí son los más afectados a largo plazo. Lo más común es que suceda en persona, por escrito y en el colegio, aunque, este también puede darse en otros espacios de convivencia incluidos la familia, la colonia y en redes sociales (cyberbullying). No importando en qué medio o a quien sea, este no debe permitirse, es inaceptable.

Los que hacen el bullying o los “bulleadores” pueden ser niños o personas que sufren de algún tipo de violencia de parte de otra persona, y su forma de manejarlo es buscando a los más vulnerables para molestarlos y hacerlos sentir de menos.

Muchas veces las víctimas de este bullying son seleccionadas por ser diferentes; por no usar ropa de moda, no tener las últimas herramientas tecnológicas, ser tímidos o estudiosos o incluso por formar parte de una minoría social o racial.

Es importante también mencionar que no todas las situaciones agresivas esporádicas son consideradas bullying, como las típicas “bromas pesadas”, los juegos bruscos o peleas que suceden en el ámbito escolar, ya que no suceden de forma repetitiva y a una persona en específico. Sin embargo, estas tampoco no deben ser aceptadas como comportamiento normal y deben ser tratadas con las personas adecuadas en el colegio y el hogar evitando que esto evolucione y continúe.

Algunas de las características que permiten diferenciar e identificar el bullying de las situaciones comunes en los colegios son:

• Intencionalidad en la agresión a una persona en específico. Sea esta física, verbal o virtual.
• Desequilibrio de poder entre acosado y acosador. Comenzando desde aspectos físicos como tamaño o fuerza, psicológicos o sociales que generen desequilibrio de fuerzas en las relaciones interpersonales.
• Repetición de la agresión a lo largo del tiempo. Aumento de frecuencia o intensidad de violencia contra una misma persona sin motivo aparente.

La UNESCO ha trabajado por varios años en la prevención y formación docente para el manejo de estas situaciones, recalcando la importancia de solucionar a profundidad las causas de la violencia, buscando que la cultura de respeto de los derechos de los alumnos sea cada vez más amplia e importante.

Este no es un tema que debe ser tomado a la ligera ya que trae consecuencias graves para la autoestima y salud general de un niño.

Puede afectar la concentración en clases o la participación en actividades escolares y llegar a extremos de abandono de la institución o toma de terribles decisiones como hacerse daño a sí mismo o a los demás debido a la gravedad de la situación.

Es importante tomar medidas antes de llegar a estos extremos y mantener una comunicación constante con los hijos o alumnos. Se debe identificar quiénes son acosadores, acosados o sujetos pasivos (aquellas personas que observan y no dicen nada) y hacerlos reaccionar y hablar con los encargados para buscar soluciones prontas.

A parte de identificar estas actitudes o situaciones en clase, también debemos prestar especial atención a las redes sociales a las que tienen acceso, ya que ahora, esta modalidad de bullying puede llegar a ser más fuerte y directa para los acosados e imperceptible para los padres o maestros, causando mucha ansiedad y miedo en los niños por la importancia social de la imagen online.

El bullying es un tema controversial que debe ser manejado con la importancia debida buscando que todos aprendamos a ser tolerantes, respetuosos y a no quedarnos callados si somos testigos de alguna situación de injusticia y violencia.

Colaboración: Programa Basta de Bullying, Plan Internacional y Cartoon Network