Las onomatopeyas son palabras que imitan algún sonido y se han convertido en un recurso muy utilizado en la literatura, principalmente en cuentos y en comics. Se escriben sin utilizar comillas, ni cursiva. 

Normalmente en los comics podemos encontrar estas onomatopeyas escritas con signos de exclamación o mayúsculas, depende de la intensidad de la palabra. 

Por ejemplo: ¡PUF! Desapareció la llave. 

Otros ejemplos de onomatopeyas:

• Los sonidos de objetos

Reloj = Tic toc, tic toc.

Carro acelerando = Bruuuum, bruuuuum.

• Sonidos de animales

Vaca = Muuuu, muuuu.

Perro = Guaf, guaf.

• Sonidos de golpes

Tocar puerta = Toc toc.

Campana = Din dan, din dan. 

Las palabras onomatopeyas, se pueden clasificar en dos: 

Las onomatopeyas que reproducen sonidos: Estas onomatopeyas escritas describen un sonido pero no son aceptadas como una palabra en sí misma, por supuesto, tienen significado y es más fácil identificarlos si escuchamos cómo suenan. 

Un ejemplo es, el sonido de un pato: cuack, cuack. 

Las onomatopeyas que constituyen a una palabra: En cambio, estas, sí están aceptadas por la RAE y son palabras que utilizamos con más frecuencia. 

Por ejemplo la palabra: Crac, que es el sonido de cuando algo se rompe. 

Significado según la RAE: Voz onomatopéyica con que se imita el sonido de algo que se quiebra.

Por lo tanto, estas palabras onomatopéyicas, son un recurso literario nos ayudan a imaginar y entender mejor los cuentos, comics, historias o cualquier otro texto.